Lucir un abdomen plano no es una utopía –siempre y cuando tengas constancia, claro–. Tampoco, es una tortura –salvo que, irónicamente, hayas optado por el modo más sencillo de lograrlo-. Alcanzar un abdomen plano sin morir en el intento es posible; y nosotras te diremos cómo.
#1 La hora mágica
Para empezar, disfruta de un snack rico en proteínas entre las 3 y 4 de la tarde; puede ser una barra de cereales, queso descremado, unas almendras o una manzana orgánica. No importa cuántas cosas debas hacer a estas horas: no dejes de comer este tentempié. Este impulsará el funcionamiento de tu metabolismo y mantendrá balanceados tus niveles de azúcar en sangre. Esto significa que ayudará a mantener a raya a la insulina, que es la responsable de acumular grasas en el abdomen.
#2 La pelota suiza
Acude a tu pelota suiza todos los días. Realiza el siguiente ejercicio:
- Con la pelota en mano, recuéstate boca arriba con las piernas y los brazos extendidos.
- Lleva la pelota a la altura de tu pecho y, al mismo tiempo, eleva las piernas para tocar con ellas la pelota.
- Retorna a la posición original y haz entre 10 y 12 repeticiones. Ten cuidado: en ningún momento despegues la espalda del suelo.
#3 Poca azúcar
Modera tu consumo de azúcar al máximo. Esta medida determinará que los niveles de insulina permanezcan bajos y los de glucagón, altos. Esta es la hormona que se encarga de transformar en energía la grasa que se ha acumulado en tu abdomen.
#4 Masticar, masticar y... masticar
La digestión comienza en la boca. Por tanto, si no masticas bien tus alimentos, estos no serán digeridos de forma adecuada. ¿El resultado? Hinchazón y gases. Así que no comas a las apuradas; disfruta de tus alimentos de forma consciente. Siente su textura, saborea su gusto... Comer se tornará en un verdadero disfrute.
#5 Orden de prioridades
"Para tener el abdomen plano debes hacer 500 abdominales por día". Esto es un MITO; si en verdad anhelas liberarte de la barriga, este tiene que ser tu orden de prioridades:
- alimentación balanceada: invierte al menos 1 hora diaria en la preparación de platillos más saludables.
- Cardio: dedícale a este tipo de ejercicio 20 minutos, entre 3 y 5 veces a la semana.
- Ejercicios de fuerza: haz 15 minutos de esta actividad 3 veces a la semana.
- Abdominales: realiza 5 minutos de este ejercicio 3 veces a la semana.
#6 Menos sal
La sal es una de las mejores aliadas de las pancitas prominentes; por tanto, trata de limitar su consumo. Cuando no puedas obviarlo, opta por la sal marina o la kosher, que tienen menos cantidad de sodio. Ten presente también que hay un gran número de hierbas aromáticas en el mercado para saborear tus comidas de un modo más saludable.
#7 Trucos indumentarios
Usa tus prendas para resaltar otras partes de tu cuerpo. Así, por ejemplo, puedes usar faldas o shorts para que tus piernas se roben toda la atención. También tienes la posibilidad de vestir blusas o remeras con las que puedas mostrar tus hombros.
#8 Granos enteros y grasas monosaturadas
Diversas investigaciones han comprobado que quienes se alimentan con granos enteros y grasas monosaturadas pierden –y no vuelven a encontrar– la grasa abdominal con más facilidad. Por tanto, ¡no dejes de enriquecer tu dieta con estos grupos alimenticios!
Información recomendada: Cómo quemar grasa abdominal
Estas son las estrategias que te proponemos para que al fin puedas disfrutar de ese abdomen plano que tanto quieres. Y a ustedes, barrigas, les decimos: ¡tiemblen!
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